Siempre, en nuestra vida, tenemos alguien a nuestro lado que nos apoya, nos escucha y nos deja libertad para decidir.
En los tiempos que no somos capaces de discernir, están ahí.
En todos los momentos negativos; la pena, la tristeza, el sufrimiento, la desolación… están ahí, como un ángel con aspecto distinto, dentro de otro cuerpo, pero siguen ahí.
Siempre hay alguien, aunque a veces no nos demos cuenta, que esta cerca en los peores momentos; perdidas de salud, de seres queridos… perdidas al fin y al cabo.
Siempre tenemos alguien que es incondicional, que nos escucha, anima e intenta hacernos ver el camino correcto, aunque esto no es siempre posible.
La vida nos hace estar al borde del abismo, no saber que ocurrida mañana, no ser capaces de entender y dilucidar, ver muros ante nuestros ojos, perder la capacidad de analizar la realidad… pero a pesar de todo están ahí.
Hoy quiero agradecer a mis amigas y amigos, los que siempre han estado, en situaciones, tiempos y momentos distintos, momentos en los que no he sido yo, que he necesitado su ayuda, entregada de forma gratuita para hacerme ver donde esta la luz, el camino.
Gracias
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